Hace años, en el mundo laboral, caminé por ambas orillas. Fui la colaboradora que seguía instrucciones y la líder que guiaba a otros hacia metas ambiciosas. También fui cliente interno y proveedor. Pero siempre sentí que algo crucial se escapaba de nuestra vista, algo más vital que los números y los objetivos: la gente.
Un día, decidí hacer un cambio. Me di cuenta de que si quería que las cosas fueran diferentes, tenía que ser parte de ese cambio. Comencé a escuchar a mis compañeros de trabajo de una manera diferente, tratando de entender sus razones más profundas detrás de sus solicitudes. Descubrí que no pedían cosas por pedirlas; tenían razones profundas, como la familia, el crecimiento personal y profesional, los hobbies y el equilibrio en sus vidas, los sueños y deseos que albergaban en sus corazones.
Mi pasión me llevó a plasmar mis pensamientos en palabras. Escribí artículos en revistas y periódicos nacionales, como la Revista el Dinero Mujer y el periódico Diario Libre, con la esperanza de que todos pudieran entender lo que significa el bienestar organizacional como estrategia y los beneficios que aporta a cada rincón de la organización.
Mi educación incluye una Maestría en Negocios y Relaciones Económicas Internacionales, una Maestría en Gestión Humana y Desarrollo Organizacional, y una Maestría en Desarrollo Sostenible y Responsabilidad Social. He buscado la formación y la certificación en una amplia gama de disciplinas relacionadas con el bienestar de las personas, la cultura y la eficacia organizacional.